La Gestión

En este escenario las organizaciones pasan
a tener un rol fundamental. Son ellas las llamadas a atender las exigencias de
la sociedad. Son las organizaciones las principales protagonistas de la
sociedad moderna. Son oferentes y consumidores al mismo tiempo. Son la suma de
talentos, que supera ampliamente cualquier esfuerzo individual. Por tanto, de
las organizaciones se espera que alcance sus objetivos y metas.
Las organizaciones para el logro de sus
objetivos, que le permita su supervivencia y desarrollo deben ejecutar
cotidianamente un conjunto de actividades que tienen que estar enmarcados o guiados
por una intencionalidad que le haga posible entender el entorno con la cual
convive, utilizando, además, los recursos y talentos proveniente de su
interior. Todo para buscar satisfacer las necesidades de diversos grupos de
interés.
Ello es posible cuando se efectúa una gestión administrativa eficiente, eficaz y efectiva. Ahora bien, se entiende por
gestión administrativa al proceso que comprende la ejecución de determinadas
funciones y actividades, que se efectúan en las organizaciones para que en las
mismas se pueda dirigir, administrar, dinamizar, organizar y aprovechar los
recursos, así como al talento humano que haga posible la consecución de los
objetivos organizacionales. Para Terry, citado por Hurtado (2008), a través de
la gestión administrativa que, es un arte, se alcanzan resultados utilizando
ciertas habilidades. Dichas habilidades se sustentan en el conocimiento, la
aptitud y actitud, de los dirigentes de una organización. Por su parte
Chiavenato (2008) define a la gestión
administrativa como “el proceso de planear, organizar, dirigir y
controlar el uso de los recursos para lograr los objetivos organizacionales”
(p. 10).