miércoles, 20 de febrero de 2013

La Ética y la Moral



La ética


El ser humano es un ente social, cuya forma cotidiana de vida exige el intercambio de acciones, que afectan de una forma u otra a los demás miembros del grupo, o lo grupos, con los cuales se interrelacionan. Estas acciones se circunscriben al comportamiento, a la manera de entender y de interpretar las circunstancias de los hechos a los cuales se responden. Además, está influenciado por el marco histórico, lo prejuicios y las alternativas que la sociedad ofrece a determinada circunstancia. Quiere decir esto, para tratar de ser más claro, que en algún momento o situación, un hacer o dejar de hacer, es aceptado, pero en otro no. Por ejemplo, en la época de la colonia tener a un ser humano como esclavo era un hecho aceptado por la sociedad, era más bien algo natural. Ello es inaceptable actualmente, y sería algo socialmente aborrecido. Sería visto como algo antiético e inmoral.
Antiético e inmoral, es contrario a la ética y a la moral, como es obvio. Pero, que son esos conceptos, cuál es su importancia, cómo afecta a la sociedad y a quienes aplica. Son muchas dudas que pueden surgir en un mundo cada vez más convulsionado.
En primer lugar, la ética es una rama de la filosofía, rama del conocimiento humano que intenta adentrase en los aspectos más relevantes del saber general humano. La ética también es conocida, siguiendo a Warburton (2000), como filosofía moral. Según Rojas (2005) ética se “deriva de éthos que significa costumbre” (p. 121). Es por ello que la ética es conocida como la ciencia de las costumbres. Ese mismos autor aclara que “podemos, pues, decir, que la ética es el estudio racional y critico de los valores morales” (p. 122). La ética tiene que ver con los actos, el carácter, el comportamiento y la persona, como poseedor de los mismos. Su marco de estudio, además, tiene especial interés en el análisis de la bondad o la maldad, llevada a cabo por los seres humanos. Por su parte, Flores (2005), menciona que “la ética es la teoría o ciencia del comportamiento moral de los hombres en sociedad. Es la ciencia de la conducta humana” (p. 41).
La ética es un hecho racional, debido a que se basa en la razón para la concepción de sus modelos de acción. El hacer el bien o el mal, como forma de comportamiento, depende de actos racionales; quienes los ejecutan están conscientes de sus actos y consecuencia, para ellos mismos y para con los otros.
La ética como ciencia, busca los conocimientos necesarios que permitan a los seres humanos la mejor elección de comportamiento con el propósito de preservar su estabilidad en sociedad, guiando o señalando el modo de cómo debe actuar, para alcanzar el bien, la felicidad y evitar la autodestrucción producto de actos alejados del sentido común. La ética de las guerras, en las profesiones, en la familia, como individuos, lo que intenta al final es que lo correcto se imponga. La ética en la guerra, por ejemplo, evita que un país lance una bomba atómica sobre otro, debido a que impone restricciones morales que frenar ese acto irracional.
En el ámbito profesional, la ética se encarga estudiar la conducta de los seres humanos, en cuanto a las profesiones que ejercen, y cuál debe ser su forma de actuar de manera tal que hagan lo correcto en lo que respecta a su relación con las empresas o personas a las cuales prestan su apoyo, y ofrecen sus conocimientos y habilidades.

La moral


Un concepto íntimamente relacionado con la ética es la moral. Esta, de acuerdo a Gálvez (2007), citando a Paul Faulquié “…es la teoría razonada del bien y del mal” (p. 17). El mencionado autor señala que la moral es un hecho normativo, debido a que establece las normas que aclaran lo que resulta bueno y lo que es malo, en el comportamiento humano en sociedad. La moral permite determinar lo que se debe hacer y lo que no; lo permitido y lo prohibido, desde la perspectiva del fenómeno social.
La moral establece las reglas y principio que deben seguirse y por los cuales se juzga a un individuo. Al igual que la ética, la moral parte de la premisa básica de la racionalidad. Esas reglas y principios están íntimamente relacionados con las costumbres y la conducta que los seres humanos tienen en sociedad.
La moral, como lo menciona Loada (2006), es el “arte de vivir”. Para este autor, la moral es un arte, distinto a la ética que se define como una ciencia, la que estudia el comportamiento. El arte se puede definir como “el conjunto de conocimientos teóricos y técnicos, las experiencias y las destrezas que son necesarias para desempeñar con maestrías una actividad” (Loada, 2006: p. 17). La moral, busca que el ser humano cumpla con principios básicos que le permitan vivir bien, en armonía, en equilibrio, tanto físico como espiritual. Que tenga su “conciencia tranquila”. Por medio de la moral es posible tener el conocimiento necesario para saber que hacer o evitar de forma inteligente, que permita a los seres humanos conservarse y vivir felices en sociedad.
La moral exige obligaciones, las cuales son las necesidades de hacer o de evitar ciertas acciones que impidan la armonía social y la felicidad, fin último de cada ser humano.
Según Gálvez (2007), la moral tiene dos perspectiva de estudio, uno material y otro formal. Para este autor “el objeto material de la moral son las costumbres y la conducta humana. El objeto formal…es el conjunto de leyes que deben informar y orientar la actividad humana” (p. 16). Los Códigos de Ética profesionales, representan el aspecto formal de la moral.
Un aspecto importante de la moral es el deber, que es en definitiva la necesidad de realizar una acción con respecto a la ley. Este es un mandato incondicional de hacer algo (Rojas, 2005). Este mismo autor menciona que existen mandatos condicionales, lo cuales Kant los denominaba “imperativo hipotéticos”, mientras que el deber es un “imperativo categórico”, lo cual significa que es un hecho incondicional, como ya se ha mencionado. (Ibídem).
Todo sujeto posee un deber moral, pero también tiene un conjunto de responsabilidades. Al respecto Rojas (2005), explica que la responsabilidad
significa que podemos responder por lo que hacemos o dejamos de hacer. Más estrictamente, la responsabilidad implica que el ser humano actúa de forma consciente, que elige el curso de acción a seguir y que puede asumir las consecuencias que se siguen de su acción.
Por tanto, la responsabilidad está asociada a la capacidad que poseen los seres humanos de actuar racionalmente, conscientes de sus actos y de las consecuencias de los mismos, por lo cual está atento al bien o el mal que causan y a los principios y valores que guían su acción. Son entonces, sujetos del hecho moral.

La importancia de la ética y la moral en el ejercicio contable


La ética y la moral son de suma importancia para el profesional de la Contabilidad, debido a que siendo esta una actividad en la cual se presta un servicio para el manejo de información de terceros, la cual debe basarse en la sinceridad, pulcritud, confiabilidad y transparencia para su procesamiento, y presentación.
Por tanto, la observancia de los principio y valores morales deben ser una forma de vida para el Contador Público. Muchos interesados legítimos dependen de la verdad que las cifras indiquen, por tanto los profesionales de la contabilidad deben ser íntegros, éticos y con alto sentido moral, para no afectar a los usuarios de la información contable.
Buena parte de la económica depende de la información que presenten los Contadores Públicos, lo cual resulta en una gran responsabilidad para estos profesionales, quienes deben estar consciente de ese hecho y de las implicaciones que los actos fraudulentos pueden tener para el colectivo que confía en ellos.
El debe principal de todos Contador es la proporcionar información confiable. Por tanto, esa debe ser su responsabilidad principal, más allá de presiones e intereses particulares que pretendan desviar su acción moral.



Conclusiones


La ética, como rama de la filosofía que estudia el comportamiento o conducta del ser humano, encaminada hacia el bien, es de especial importancia para comprender las razones por la cuales los miembros de la sociedad actúan de la forma como lo hacen y cuáles son elementos reguladores de sus acciones, que permiten limitar los elementos autodestructivos de sus actos.
La ética es un conocimiento de la conducta propia dirigida a orientar la actividad humana hacia el bien, evitando la destrucción. Por tanto, la ética es la ciencia de las acciones humanas.
Por su parte, la moral establece las reglas y principio que deben seguirse y por los cuales se juzga a un individuo. Al igual que la ética, la moral parte de la premisa básica de la racionalidad. Esas reglas y principios están íntimamente relacionados con las costumbres y la conducta que los seres humanos tienen en sociedad.
Los seres humanos deben ser responsable de sus actos y asumir la consecuencia que los mismos acarrean. Es fundamental que esos actos estén sujetos a la moral, y los principios y valores asociada a ella. Ello permitirá una sociedad más justa, más feliz y más estable.
Igual ocurre con los profesionales de la Contaduría Pública, como miembro de la sociedad y seres humanos en sí. Sus actuaciones deben estar apegadas a la moral, a los principios de honestidad e imparcialidad. Aferrados a los valores fundamentales de la ética. Siendo su norte, la presentación de información confiable, ajustada a la verdad y a la transparencia, bajo cualquier circunstancia.

Bibliografías


Gálvez de Valdez, A. (2007). Supremacía de la moral sobre el Derecho. LibroenRed. www.libroenred.com

Rojas, C. (2005). El asombro del penar: La filosofía en el ámbito de la humanidad. San Juan, Puerto Rico: Editorial Isla Negra.

Loada, J. (2006). Moral el arte de vivir. México: Ediciones Palabra, S.A

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